Ha sido un sueño hecho realidad, y algo que jamás pensé que iba a hacer tan pronto. Sí, a Nueva York quería ir algún día, eso desde luego, pero jamás pensé que se me presentara esta oportunidad. Y no sólo la oportunidad de viajar, visitar cuatro cosas y rápido que no da tiempo, nooo, de vivir allí como un ciudadano más, y eso no lo puedo expresar con palabras. Tres semanas allí, estudiando, conociendo lugares maravillosos, conociendo a gente increíble y viviendo un sueño 24 horas al día me han dejado flipando (quiero decir que todavía lo estoy). Este tiempo allí me ha demostrado una vez más que no estoy equivocado al admirar tanto la cultura estadounidense, sea al sur, en Florida donde estuve hace cuatro años y medio, sea al noreste, en Nueva York, este verano.
PD: Y como en todos mis viajes, siempre hay una canción que me recuerda lo vivido en forma de mil imágenes por minuto, y Nueva York tiene la suya por supuesto, es Beautiful, de Akon, una canción que sonaba allá donde fuéramos, y que me daba mucha energía.